La Marea Magenta

Para gobernar Melilla con eficiencia, basta con perseguir la corrupción, ser austeros y dejar tus intereses personales en el trastero de casa. En UPyD, nos armamos con sensatez, coherencia y una elevada dosis de buena voluntad, y demostraremos -cuando tengamos la confianza de los ciudadanos- que el cambio es posible, siempre y cuando abandonemos la pasividad, el derrotismo, así como el conformismo que tanto obnubila a la sociedad.

La “transversalidad” de UPyD “descoloca” al PP, PSME y CpM, ya que nos siguen considerando “una anécdota”; aunque todos, sin excepción, albergan dudas sobre nuestra futura posición o estrategias, que es lo único que les preocupa. No entienden que pretendamos hacer política de verdad -sin mercadeos, sin prebendas o repartos previos de poder- considerando únicamente aquello que entendemos beneficioso para la ciudadanía, venga de donde venga, y tenga el color político que sea.

Obstinados en Melilla quienes insisten en ignorar o minusvalorar a UPyD. Más les valdría comenzar a conocernos. Aviso a incrédulos y a fogoneros de falsos mitos. UPyD es una realidad. La marea magenta avanza entre los ciudadanos, porque somos diferentes y cercanos. Porque no arrastramos viejas cadenas, odios pasados, ni acumulamos rencores en la alacena para, algún día, servirlos fríos en la bandeja del desagravio.