Parece ser, que toda la preocupación del Alcalde-Presidente-Senador, consiste ahora, en demostrar al partido socialista, que sí asiste –y mucho- a las sesiones de la Cámara Alta. ¿Y a eso lo llaman hacer política? Sea como fuere, el asunto es intrascendente, porque todos sabemos, que allí poco se “cocina” en términos de utilidad política. La acumulación de cargos, es una lamentable práctica, ejemplo del egoísmo y avaricia de algunos, que impiden y cierran el paso a otras personas con más disponibilidad para su ejercicio. No se puede atender debidamente la presidencia de una Ciudad Autónoma como Melilla, siendo Senador del Reino y además presidente del partido local. Tarde o temprano, hay dejación de funciones en uno u otro empeño, y las consecuencias, como siempre, las paga el ciudadano. Son las cosas de unos partidos que se articulan sin una regulación expresa para evitar que sus líderes acopien, cada vez, más cotas de poder en tiempos ilimitados.
16/12/09
Acumular cargos
Parece ser, que toda la preocupación del Alcalde-Presidente-Senador, consiste ahora, en demostrar al partido socialista, que sí asiste –y mucho- a las sesiones de la Cámara Alta. ¿Y a eso lo llaman hacer política? Sea como fuere, el asunto es intrascendente, porque todos sabemos, que allí poco se “cocina” en términos de utilidad política. La acumulación de cargos, es una lamentable práctica, ejemplo del egoísmo y avaricia de algunos, que impiden y cierran el paso a otras personas con más disponibilidad para su ejercicio. No se puede atender debidamente la presidencia de una Ciudad Autónoma como Melilla, siendo Senador del Reino y además presidente del partido local. Tarde o temprano, hay dejación de funciones en uno u otro empeño, y las consecuencias, como siempre, las paga el ciudadano. Son las cosas de unos partidos que se articulan sin una regulación expresa para evitar que sus líderes acopien, cada vez, más cotas de poder en tiempos ilimitados.
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