Emilio Guerra
Esteban, tiene un “morro” de sobras conocido por la ciudadanía melillense. Llegó a Melilla como Delegado del Gobierno del PP y acabó haciendo las “Américas” a costa del nepotismo imperante entre la execrable clase política que nos subyuga.
Después de otra demostración de su nefasta e incompetente gestión a causa de los vientos reinantes, la rueda de prensa del todavía presidente de la Autoridad Portuaria, le suena a mofa, guasa y afrenta a cualquier persona con un mínimo de raciocinio. La justificación del “lumbreras" -bien pagado por el pueblo- al destrozo, es que: “se trata de un edificio de 20 metros de altura, que se encuentra cara al mar y que por tanto, sufre más los efectos del viento”, pero aún riza más lo extravagante cuando afirma que “nadie puede poner en entredicho la buena ejecución de la obra”.
Bueno, pues ahí tienen ustedes a la antigua Estación Marítima, con más de 30 años en pie, que seguro no costó 20 millones de euros y nada se le ha roto con el vendaval. Claro que entonces, teníamos profesionales al frente de reconocida valía, que cobraban menos y no llegaban a sus cargos por enchufe de nadie; lo alcanzaban por méritos y esfuerzo.
Dice Esteban que en UPyD, por denunciar lo que todo el mundo ha visto, “están jugando con un tema de interés general y se sirven de él con intereses espurios”. Aquí señor Esteban, el único que juega con dinero público y también se cachondea de los ciudadanos melillenses, es usted.
Haga las maletas y márchese, pero antes, no se olvide de pasar por el Ayuntamiento para darle las gracias al Alcalde…
Esteban, tiene un “morro” de sobras conocido por la ciudadanía melillense. Llegó a Melilla como Delegado del Gobierno del PP y acabó haciendo las “Américas” a costa del nepotismo imperante entre la execrable clase política que nos subyuga.
Después de otra demostración de su nefasta e incompetente gestión a causa de los vientos reinantes, la rueda de prensa del todavía presidente de la Autoridad Portuaria, le suena a mofa, guasa y afrenta a cualquier persona con un mínimo de raciocinio. La justificación del “lumbreras" -bien pagado por el pueblo- al destrozo, es que: “se trata de un edificio de 20 metros de altura, que se encuentra cara al mar y que por tanto, sufre más los efectos del viento”, pero aún riza más lo extravagante cuando afirma que “nadie puede poner en entredicho la buena ejecución de la obra”.
Bueno, pues ahí tienen ustedes a la antigua Estación Marítima, con más de 30 años en pie, que seguro no costó 20 millones de euros y nada se le ha roto con el vendaval. Claro que entonces, teníamos profesionales al frente de reconocida valía, que cobraban menos y no llegaban a sus cargos por enchufe de nadie; lo alcanzaban por méritos y esfuerzo.
Dice Esteban que en UPyD, por denunciar lo que todo el mundo ha visto, “están jugando con un tema de interés general y se sirven de él con intereses espurios”. Aquí señor Esteban, el único que juega con dinero público y también se cachondea de los ciudadanos melillenses, es usted.
Haga las maletas y márchese, pero antes, no se olvide de pasar por el Ayuntamiento para darle las gracias al Alcalde…
Estimado Sr. Guerra.
ResponderEliminarMe parece admirable su labor y su teson. Pero cree usted que hay algo que hacer en nuestra ciudad?. El PSOE tiene sus fieles, CpM los suyos y el PP de imbroda trinca con todos los votos restantes para que no gobiernen ninguno de los dos primeros. ¿Me puede explicar que pintara UPyD en todo esto?
Publicado en Melilla Hoy (sic) ...Eso sí, el presidente de la Autoridad Portuaria considera que, después de ver como han afectado al edificio las rachas de viento sufridas esta semana se tendría que haber previsto por parte de los redactores del proyecto la posibilidad de construir la cubierta con parámetros de seguridad mayores a los 140 km/h.
ResponderEliminarClaro que sí, señor Esteban, ¿como tiene usted la poca verguenza política de manifestar que los redactores del proyecto deberían haber estudiado la posibilidad de construir la cubierta con parámetros de seguridad mayores a los 140 km/h.?
Acaso quiere usted tomarnos por gilipollas a los Melillenses.
Los autores del proyecto redactaron que la cubierta fuese de hormigón y que en la parte superior de la misma se colocase una piedra similar a la de la Ciudad Vieja, para no desentonar con el entorno.
Verdaderamente si usted y su equipo tuvieran la mínima moral, estarían hoy mismo haciendo las maletas.