Dentro de poco, de seguir la incompetencia instalada en la clase política dirigente, los melillenses, por imperativo económico, y hasta por mejor servicio y calidad, usaremos de manera generalizada para el transporte el puerto de Nador y el aeropuerto de Monte Arruit. Todo ello, sin contar con las excelencias de Saidia, que ya se encarga de mostrárnosla el viceconsejero de Turismo –del gobierno de Melilla, aunque parezca increíble- Sr. Mateos.
Melilla, se queda atrás. Melilla, no puede competir con el auge del país vecino en la zona. Melilla, se hunde, cada vez con menos posibilidades y recursos. Nuestras autoridades, mientras tanto, siguen con sus vaguedades, sus disputas e ineficiencias. Nos llevan al desastre y a la más calamitosa de las ruinas, mientras viven en la opulencia, colmados de prebendas y privilegios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario